Porque el deseo es una pregunta
cuya respuesta nadie sabe.
LUIS CERNUDA
El deseo, las fantasías, la imaginación.
Las pruebas, los intentos, las ganas de más.
Las musas, los Adonis, la primera inspiración.
Una caricia, la piel de gallina, un escalofrío.
Otra caricia, un suspiro, una quimera.
Una sonrisa sensual, un pequeño jadeo, una agradable
sensación.
Tensión, excitación.
Un suave susurro, ojos cerrados, un gemido ahogado.
Humedad entre las piernas.
Manos sin experiencia, manos que exploran, manos que
hallan.
Ritmo creciente, caricias aceleradas, jadeos
incansables.
El corazón bombea rápido.
La vida se escapa, líquida entre las piernas. El
placer es intenso.
Mi cuerpo tiembla. Soy de placer. Soy sensaciones
vivas.
La palabra placer recorre mi cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario