viernes, 30 de septiembre de 2016

LA COLECCIONISTA DE FOTOS (III)

Ahí está. Tony, el más callado de los seis. Siempre en la retaguardia, casi invisible. Excepto cuando tenía a Serena atada y amordazada. En esos momentos el callado y tímido Tony se sentía poderoso y jugaba a ser Dios. Se convertía en un desalmado que se divertía torturando a Serena. Primero psicológicamente: “eres una puta”, “no vales nada”, “estás muerta”. Y luego físicamente: golpes, quemaduras de cigarrillo, cortes de bisturí, arañazos con púas de metal…

Jamás abusó de ella sexualmente, simplemente se dedicaba a torturarla, a humillarla y minarle la autoestima. A él nunca le interesó el sexo con Serena, incluso le costaba tener erecciones. Lo suyo era  la violencia, le causaba más placer. Su misión era dejarla débil, tanto física como psicológicamente, para que su resistencia ante los abusos de los demás fuese menor, por baja autoestima o solo por agotamiento físico. Sin embargo, Serena solo pensaba en devolver todos y cada uno de los golpes y humillaciones recibidas.

Y ahí tenemos al tímido Tony, saliendo de su concesionario de coches de gama alta. Serena lleva días vigilando sus pasos. Hasta ahora ha conseguido saber que es el dueño del concesionario y que tiene dos trabajadores. Ana, su secretaria y esposa, una mujer completamente ignorante del pasado de su marido (o tal vez solo una ignorante), aunque eso no la ha librado de disfrutar o quizá sufrir algunas sesiones de dominación/sumisión en su alcoba. Tiembla al pensar que su marido le pida otra, no cree que pudiera resistirlo.

Y Alessandro, un comercial enviado desde la central de la empresa. Ni siquiera es de allí, lo que supone que desconoce a Serena y toda su historia por completo. Alto, moreno, ojos verdes… atractivo en general, y además simpático y amable, aunque posiblemente por inercia, dada su profesión. 

     —    Buenos días. ¿Necesita ayuda, señorita? — el vendedor se acerca con su cara de galán.  Piensa que siempre funciona con las treintañeras bonitas, como Serena.
     —    Estoy buscando un coche grande, para poder meter a toda la familia.
    —    ¿Familia numerosa? —se interesa, profesional.
    —    No exactamente. Mis padres dependen de mí y muchas veces me toca ocuparme de mis sobrinos. Familia numerosa, pero soltera —aclara una sonriente Serena, aparentando ser una joven abnegada con su familia.
     —    Bien, en ese caso creo que lo que necesita es…
    —    Espere. Tengo que ser sincera… quiero ver modelos y precios y comparar. No estamos en mi casa como para derrochar —responde con inocencia muy bien fingida.
   —    Entiendo… Permítame enseñarle nuestro modelo de coche familiar. Con líneas deportivas y elegantes, con…

Media hora después, Serena se ha ganado la confianza de Alessandro, haciéndole ver que le interesan tanto el coche como él mismo. Y con esa misma excusa volverá los días siguientes. En apenas tres días el guapo comercial está convencido de que la tiene en el bote y Serena ya controla los horarios de Tony.

martes, 30 de agosto de 2016

EN OCASIONES LAS ESTRELLAS SÍ TIENEN NOVIO


Las noches de perseidas siempre me han gustado, pero sé que ésta, además,  es especial. El inesperado descenso de los termómetros hasta temperaturas primaverales,  la suave brisa marina y el vaivén de estrellas en el cielo indican que algo maravilloso se avecina. Decía mi abuela materna que en noches como ésta las fronteras entre el mundo de los vivos y los muertos se diluyen y todos podemos cruzar al otro lado.

Tal vez por eso he bajado a la playa a dar un paseo. Está desierta, son las 3h de la madrugada de un jueves; pero me gusta ver el espectáculo de las estrellas cada año. Me acerco a la orilla y empiezo a andar sintiendo el chocar de las olas con mis pies. “La arena fresca bajo los pies desnudos es una de las mejores sensaciones del mundo”, pienso ensimismada.

“A mí también me gustó esa sensación siempre”.

La voz masculina, cálida y con acento andaluz me sobresalta. Un hombre camina a mi lado. Me ha asustado, pero me transmite buenas vibraciones y el susto inicial se evapora rápidamente. La tenue luz de luna no me muestra bien su rostro, pero lo intuyo familiar.

—No te asustes, chiquilla. Sólo soy un poeta —su voz suena afable y sincera.
—Disculpe, creí que estaba sola. ¿Cómo se llama? —intento verle mejor la cara pero la luna sigue sin colaborar.
—Ni se te ocurra seguir hablándome de usted. Por muy viejo que me creas, no lo soy tanto. No he cumplido aún los 40… Me llamo Fede —intuyo su sonrisa divertida.
—Encantada. Yo soy Margarita —cambio de nombre por si acaso. Parece un buen hombre, pero nunca se sabe.
—No me mientas, chiquilla. Te llamas Alejandra. Es un nombre demasiado bonito para esconderlo…
—¿Cómo sabe usted…? 
—¡Nada de usted! —me interrumpe con algarabía— Yo sé muchas cosas. Siempre las supe, igual que tú… —ahora sí, la luna me permite ver a medias su rostro. Veo su sonrisa enigmática y a la vez orgullosa. Parece que le encanta este juego de despistarme.
—No acabo de entender… —estoy confusa. Se parece al poeta, sí. Pero es imposible. ¿O tal vez no?
—Acompáñame — me pide tendiéndome su brazo para que me enganche a él. 


viernes, 12 de agosto de 2016

MELIBEA: ¿SEDUCTORA O SEDUCIDA?

         
             La figura de Melibea es una de las más interesantes que la literatura puede aportar. En una lectura superficial de La Celestina, podríamos entender a Melibea como la joven que se deja seducir por el hombre y cae en la tela de araña que finamente ha preparado la medianera. Sin embargo, si rascamos un poco más, nuestra visión de la cándida Melibea cambia y aparece un personaje mucho más complejo.


            Lo primero que debemos tener presente es que forma parte de un todo indisociable: la pareja que forma con Calisto. Sin embargo, está lejos de ser su calco, pues las diferencias entre ambos son notables y además están justificadas tanto por el eterno motivo de la diferencia entre sexos, como por otras particularidades históricas.

            Melibea se presenta fuertemente afianzada en la realidad, dentro de un marco familiar estable y la sanción de la sociedad es lo que rige su conducta desde el principio. Se atiene a un código impuesto, el código del amor cortés, en el que la falta de humildad del vasallo provoca la ira de la señora, de ahí que su primera reacción sea la ira ante Celestina. Su puesto en la sociedad es algo muy presente en Melibea; ya enamorada de Calisto, sigue reteniendo la responsabilidad de su condición, que defiende ante el deseo de éste de quebrar las puertas. Esto destaca la responsabilidad social de la doncella, quien además se acusa de haber perturbado con la muerte de su amado el orden de la ciudad.

Esta preocupación por lo que piense la sociedad la lleva a mantener en secreto sus amores, es el sentimiento del honor quien la obliga, mucho más arraigado en Melibea que en Calisto. Melibea es, pues, el debate entre pasión y deber. Y es por ello que sigue defendiendo su honor, esta vez de forma débil, en la primera cita con Calisto, cuando le pide que evite “estos vanos e locos pensamientos” para evitar las habladurías: “No quieras poner mi fama en balança de las lenguas maldizientes”.

miércoles, 8 de junio de 2016

LA COLECCIONISTA DE FOTOS (II)

“Saluda a la zorra de tu hermana de mi parte”.

¡Bang!
¡Bang! 

El tiro a bocajarro libera otro poquito del alma atormentada de Serena, mientras la voz grave y profunda canta Te sientes tan fuerte que piensas  que nadie te puede tocar…

Saca la última foto de Samuel: atado a la mesa plegable, con la cabeza ensangrentada, golpes por todo el cuerpo y un corte que atraviesa su rostro desde la frente al mentón, como dividiéndolo en dos. Con las manos y el miembro amputados. Y el tiro aún humeante entre ceja y ceja. Serena se siente plenamente satisfecha con su trabajo. Después de todo, aquella asignatura de fotografía del instituto le ha servido para algo.

***
Samuel ya sabía de antemano que ese sería su final, aquellos sueños de un mar embravecido, los cuchillos a su alrededor y los gritos de aquella chica del pasado no presagiaban nada bueno. Pero el golpe definitivo fue el sueño con su desaparecida hermana Paula, con un aspecto horrible, llena de cortes, y diciéndole que hay que saldar cuentas con el pasado. “Todo se paga, Samuel. Todo se paga. Ella está cobrándose la deuda… todo se paga Samuel.”

No podía imaginar que ELLA seguía viva. Era imposible, él mismo se encargó del asunto. Decidió que solo era un sueño provocado por la desaparición de Paula y su propia imaginación. Aun así, tanto el mal presentimiento como la sensación de mal cuerpo se instalaron en su vida y la angustia le atenazaba. Algo no iba bien. Y entonces supo que ELLA había vuelto. Lo que no sabía era que apenas 24 horas después estaría muerto y sería la segunda foto en su particular y escalofriante colección.

"Todo se paga, Samuel"

domingo, 22 de mayo de 2016

CITA A CIEGAS

Aquel silencio siempre le había gustado a Alba. Esas horas desiertas en las que nadie transita las calles y una mujer puede sentirse dueña del mundo o presa fácil. Depende del carácter de la mujer en cuestión, claro.

Baja la calle ancha que lleva a la plaza de la Libertad, popularmente conocida como la plaza del ataúd por tener esa forma, pasa por delante del mercado, gira en la siguiente esquina para enfilar la avenida hacia el paseo marítimo y justo en ese momento se encuentra de frente con su destino.

—Te estaba esperando —le espeta el hombre con un gesto tranquilo. Aparenta unos 40 años. Lleva traje y sombrero, al estilo de los ladrones de guante blanco guapísimos de las películas.
—Así que por fin nos conocemos… — Alba sabía que esa noche era LA noche. Llevaba demasiado tiempo esquivándole— Supongo que tendremos tiempo de charlar un poco.
—Todo el tiempo que necesites. No hay prisa. Ya no.

Ella y el misterioso hombre se encaminan hacia la playa. Desechan andar por el paseo marítimo y bajan directamente a la arena. Alba se descalza para sentir la arena fría bajo sus pies, le recuerda su niñez y la barca de pescador de su abuelo.

viernes, 6 de mayo de 2016

EL SUEÑO TRUNCADO

Pues así no podemos seguir. A mi marido
le entró un furor sangriento que nunca había tenido.
¡No sé qué mal de ojo le hicieron en España!
¡Es Castilla que aceda las uvas del champaña!
¡Son los autos de fe que hace la Inquisición!
¡Y las comedias de Don Pedro Calderón!


La marquesa Rosalinda, Ramón del Valle-Inclán




Entre finales del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX asistimos a tiempos llenos de contrastes y cambios, aderezados con guerras diversas. Se radicalizan las ideas tanto hacia la extrema derecha como hacia la extrema izquierda (seguro que esto les suena, pues lo que vivimos hoy se aproxima bastante a convertirse en una reproducción actualizada de aquello). Pero sin duda, es la mujer quien más cambios experimenta durante este tiempo. De ser el ángel del hogar pasa a ser la principal mano de obra en las fábricas y a reivindicar sus derechos, para volver a ser de nuevo el ángel del hogar, pero con muchas más restricciones morales en lo referente a su capacidad de actuación.

En este contexto, ideologías como el anarquismo cobran gran importancia y suponen un soplo de aire fresco y un punto de apoyo importante para las mujeres. Prueba de ello son los liberatorios de prostitución que se dedicaron a cerrar burdeles e instruir a las mujeres para que pudiesen llevar una vida digna. Sin embargo, con el auge y el triunfo de los fascismos, todo eso se vino abajo y la mujer volvió a ser una especie de sujeto pasivo bajo las órdenes del género masculino.

jueves, 31 de marzo de 2016

TIRANT I QUIXOT, ELS BONS AMICS

L’any 1615 veu la llum la 2a part de El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha. L’any següent (1616) morirà el seu autor, Miguel de Cervantes. Enguany, 2016, estem doncs al quart centenari de la mort de l’escriptor espanyol. De tots és sabuda la seua importància a les lletres espanyoles i la seua influència a la novel·la de tot el món, però sovint oblidem que aquesta obra també rep influències d’altres anteriors.  


Una d’aquestes influències ve de la mà d’un valencià. Joanot Martorell (1413-1468) començà el Tirant lo Blanc al gener de 1460. La seua redacció finalitzà quatre anys més tard però mai va aconseguir veure la seua obra impresa, ja que la primera edició apareixeria a València el 1490 i la segona a Barcelona el 1497. L’editor encarregat de la 2a edició va decidir publicar-la traduïda al castellà a Valladolid el 1511, però com obra anònima. Aquesta edició és la que estava a la biblioteca del Quijote.

El capellà de la novel·la castellana, no sols el salvarà de les flames quan fa la cremà dels llibres que suposen l’origen de tots els mals del cavaller, sinó que a més a més li recomana la seua lectura al barber, fent-li grans alabances: “¡Válame Dios! –dijo el cura, dando una gran voz–. ¡Que aquí esté Tirante el Blanco! Dádmele acá, compadre; que hago cuenta que he hallado en él un tesoro de contento y una mina de pasatiempos.” [...] “Dígoos verdad, señor compadre, que por su estilo es éste el mejor libro del mundo: aquí comen los caballeros, y duermen y mueren en sus camas, y hacen testamento antes de su muerte, con estas cosas de que todos los demás libros de este género carecen”.

Efectivament, és el seu realisme el que li resulta fascinant. Que el Tirant no muira al camp de batalla, sinó malalt al llit, que faça testament abans del desenllaç, que es queixe dels dolors... és cosa poc comuna a les novel·les de cavalleries de l’època. Per això li resulta tan interessant a Cervantes, que parla per boca dels seus personatges al Quijote.

domingo, 20 de marzo de 2016

CINE Y EDUCACIÓN (II): DULAINE

Es el turno del segundo de nuestros profesores de película: Pierre Dulaine. Hay que resaltar que, a diferencia del Profesor Holland (a quien dedicamos la primera parte de este artículo sobre cine y educación) el Pierre Dulaine de la película Déjate llevar es un personaje real: un profesor de baile que propició la aparición de toda una serie de programas gratuitos de danza para los alumnos más conflictivos de los institutos de Nueva York.



Estamos ante una cinta que a simple vista parece una película de baile, un ejercicio artístico capitaneado por el polifacético Antonio Banderas. Sin embargo, solo hay que rascar un poco para ver que su propósito es diferente. Esta película habla de educación, pero no de cómo enseñar lengua y literatura o matemáticas, sino de la educación en actitudes, valores y normas, algo cada vez más necesario en la educación y que cualquier profesor debe tener en cuenta, pues se trata de una materia transversal que atraviesa todo el currículum y que es absolutamente imprescindible para formar a sus alumnos. El baile solo es el pretexto para articular la historia, una forma atractiva de presentarla: los pasos elegantes, la música, el escenario… es el contexto perfecto.

viernes, 11 de marzo de 2016

OTRA VEZ HOY...

Y así pasan los días, de lunes a viernes
Como las golondrinas del poema de Bécquer
De estación a estación enfrente tú y yo
Va y viene el silencio.

Jueves, La Oreja de Van Gogh


Hace un par de semanas se hizo viral la carta que una estudiante le dedicó a dos chicas asesinadas. Murieron por negarse a ser tocadas, a ser tratadas como ganado. Una muerte violenta e injusta.
Yo morí por subirme al cercanías, como cada día. Ese fue mi único pecado, mi gran error. Esas chicas fueron ofendidas y trataron de defenderse, pelearon por sus derechos y por su vida. Yo no tuve esa oportunidad. Espero que nadie malinterprete mis palabras. Tan atroz fue su muerte como la mía propia, e igualmente deleznables nuestros asesinos. Pero ellas pudieron luchar. Yo solo pude morir. En un segundo todo se acabó.
Por si alguien aún no ha caído en la cuenta de quién soy, les diré que eso no importa, solo soy una de las 193 víctimas del conocido como 11-M. Una entre tantas, una que cogió el tren como cualquier otro jueves para ir al trabajo. Y que nunca llegó. Hace ya 12 años de eso y, desde entonces, he visto cómo día tras día mis asesinos se han hecho fuertes.
Pero lo peor no es eso. Lo peor es ver cómo la gente ha ido olvidando todo aquello, cómo han pasado del estupor, la rabia y la impotencia al olvido, a la indiferencia, a que nadie hable de aquello. The show must go on, o en versión patria, el muerto al hoyo y el vivo al bollo…
¿Creen que si no se toca el tema, desaparecerá de la historia? ¿Creen que volveré a la vida si fingen que nunca pasó? A los que estamos a este lado de la línea nos encantaría que así fuese, y también a los que aún esperan vernos entrar por la puerta diciendo “Ya estoy aquí. Todo fue un mal sueño”. Pero ya ven ustedes que hay cosas imposibles.
La gente se llena la boca con los muertos de la Guerra Civil, la memoria histórica y las fosas comunes. Reclaman la restitución del honor de sus muertos. Otros hablan de víctimas de ETA, aunque de algunas en concreto, posiblemente de las más mediáticas. Incluso hay algunos que ahora hablan de cal viva, haciendo referencia a los terroristas muertos a manos del GAL. Pero parece que nosotros no le importamos a nadie…
Pues les diré una cosa, hoy es otra vez 11 de marzo. Sí, otro 11 de marzo que se atraganta en las vidas de 193 familias. De mis hijos, que se quedaron sin su madre. De la señora del 5º, que perdió a su marido. Del abuelo que se quedó esperando la visita de esa nieta que acababa de volver de estudiar en el extranjero. De esos padres que no volvieron a ver sus hijos…
A nadie le importa. Solo hay tiempo y páginas para las peleas de políticos, para las luchas por un escaño y un sillón.
Lo único que nos queda es que alguien se acuerde de nosotros, de aquel día, de aquel regusto a hierro en la boca, de todos aquellos (médicos, bomberos, policías…) que se lanzaron a ayudar a los heridos y a rescatar nuestros cuerpos sin vida para devolverles una parte de la dignidad que nuestros asesinos hicieron saltar por los aires. Y nos queda que ese alguien que se acuerda de todo esto alce la voz y grite nuestros nombres. Y recuerde al mundo nuestro sacrificio en el altar de los dioses del fanatismo. 
Nadie podrá devolvernos la vida. Lo que sí se puede hacer es recordarnos y apoyar a nuestras familias mutiladas por la barbarie. Gritar al mundo que no morimos en vano y que luchareis por nosotros, más allá de intereses, colores políticos, pozos de petróleo y postureos varios. Que los miles de heridos cuya vida jamás será igual no están solos, que tendrán siempre muchas manos que les ayuden y otros tantos hombros en los que buscar consuelo.

Y que nunca más seremos olvido diluido en un lazo negro.

jueves, 25 de febrero de 2016

CINE Y EDUCACIÓN (I): HOLLAND

¿Quién se apunta a una sesión de cine? Os propongo adentrarnos en las películas que nos hablan de forma directa o indirecta sobre la educación. Tenemos ejemplos muy claros, como Rebelión en las aulas (1967), El club de los poetas muertos (1989), Mentes peligrosas (1995) o Una mente maravillosa (2001). Hay también otros ejemplos menos conocidos, o que tienen la educación o la figura del profesor como un elemento clave de la trama pero no como tema central. Entre estas últimas, podemos citar títulos como La piel dura (1976), Profesor Holland (1995), American history X (1998), Cadena de favores (2000) o Déjate llevar (2006).


Pero, ¿por qué se produce este reflejo de la educación en el cine? Los medios de comunicación transmiten una imagen concreta de la educación y el profesorado. ¿Se corresponde con la realidad el estereotipo que transmiten? Tal como señala la psicóloga Felicidad Loscertales Abril: “Aunque se discute mucho si los medios crean la opinión pública o la siguen y confirman, en el estado actual de la cuestión es innegable que existe una relación circular e interactiva entre ambos fenómenos”. Loscertales considera que en el cine no se trata la educación para revisar la ideología pedagógica o por mejorar la práctica docente, sino que suele usarse a sus protagonistas (profesores y alumnos) para tratar temas más amplios, actuales y generalmente de calado social, en los que sin duda se otorga ciertos atributos a la figura del profesor.

domingo, 31 de enero de 2016

FUTURO INCIERTO. EL DESENLACE

LAS 12h. ÉRIKA

No puede ser. Mi madre no. ¿Por qué pediría que me leyesen las cartas? Si realmente no me hace falta, ya sé lo que se avecina en mi vida. Lo único que espero es que mi madre aguante al menos hasta Navidad, quedan un par de meses y será tan feliz viendo a mi sobrino abrir sus regalos…

Venga, mejor la llamo y me quedo más tranquila, ahora que los japoneses ya están servidos. “Sergio, voy al almacén a hacer una llamada”, “Okey preciosa, no hay problema”. Sergio siempre tan amable, a veces pienso que le pongo. Lástima que a mí me ponga su hermano…

     —    Mamiii, ¿cómo estamos hoy? —intento sonar alegre.
   —   Ahora mejor, hija. Ya sabes que a estas horas empiezo a notar los efectos de la medicación.
    —    Bueno, poco a poco. ¿Quieres que te lleve algún caprichito a mediodía? —me gusta cuidarla y que sienta mi cariño.
     —    No, hoy no tengo ganas de dulce. Mañana mejor, ¿te parece?
     —    Perf…
"
"Mamiii, ¿cómo estamos hoy?"
Bang!! Bang!! Bang!! Bang!!

     —    ¿Pasa algo cariño? Te has callado de repente…
    —    No lo sé, se oyen ruidos raros. Pero no te preocupes, están todos fuera, pueden apañarse —quiero aprovechar la llamada un poco más—. Oye, ¿has hablado con Mire estos días? ¿Ya te ha dicho si viene con el enano en Navidad o qué?
    —    Me dijo que sí, aunque tenía que hablar con tu cuñado. Ya sabes lo reacio que es el holandés a hacer viajes —se nota que Hans le cae como una patada en el culo. No tiene remedio…

Bang!! Bang!! Bang!! Bang!!

lunes, 25 de enero de 2016

FUTURO INCIERTO (III)

LAS 12h. MIGUEL

Menudos imbéciles, creyendo en fantasmas, más allá y gilipolleces. ¡Panda de tarados! Menos mal que me he ido a dar una vuelta para despejarme.

Parecen mi abuela, siempre obsesionada con esos temas, haciendo rituales estúpidos y sin ningún efecto, o rezando a santos que nada hicieron por ella. Su confianza en supersticiones, y no en la ciencia, le costó la vida. Charlatanes, estafadores o simplemente ignorantes que creen a pies juntillas en sus supuestos poderes. Eso es lo hay detrás de tarotistas, curanderos, gente que lee las manos y cosas similares.

La mayoría de sucesos tachados de paranormales tienen explicación científica o son montajes. Juegan con la vida y la muerte, con los sentimientos y las creencias de las personas. Se aprovechan de su inocencia y su desesperación para sacarles el dinero. ¡Qué asco, de verdad!
  
Lo que no entiendo es cómo una persona tan buena como Queco entra en un juego como ése. Supongo que realmente cree que tiene poderes, porque no es mala gente. Me niego a creerlo. Si él supiera cuánto le quiero… Pero claro, nadie sabe de mis inclinaciones y él tiene toda la pinta de ser hetero. Tímido, con esa cara de niño desamparado, pero hetero. Amor imposible, para no perder la costumbre…

"Charlatanes, estafadores o simplemente ignorantes que creen a pies juntillas en sus supuestos poderes"

En fin, voy a volver, que ya llevo demasiado rato dando vueltas. Esperemos que no se hayan enfadado demasiado conmigo. Menos mal que ya conocen todos mi carácter y saben perdonar mis arrebatos. En el fondo somos una pequeña familia, molamos bastante, ahora que lo pienso…
¡Vaya! Parece que hay bastante gente en la cafetería, me va a tocar currar en serio.

lunes, 18 de enero de 2016

FUTURO INCIERTO (II)

LAS 12h. QUECO

Espero haberme equivocado en la lectura de las cartas. El destino no puede ser tan jodido.

“Ayuda. Ayuda…”  Y encima esto, una presencia que se manifiesta desde hace rato pero a la que no veo. ¿Quién me reclama? “Muerto soy”. Suena a Siglo de Oro o a héroes románticos, como el Tenorio. No entiendo nada, joder. Voy a llamar a mi madre, siempre sabe qué hacer en estos casos. Sabe mucho más que yo de estos temas.

"Muerto soy"


Bang!!
Demasiado tarde. Ya ha empezado.
Bang!! Bang!! Bang!!

domingo, 10 de enero de 2016

FUTURO INCIERTO

No pienso nunca en el futuro
porque llega muy pronto.


ALBERT EINSTEIN


Queco empieza a repartir cartas en silencio sobre el tapete. Su aparente parsimonia y la expectación de los presentes dan un aire ritual a la situación (a pesar de la cara de fastidio de Miguel). Todos se han situado alrededor de la mesa, de pie, detrás del flamante tarotista y de la curiosa que pide conocer su futuro, y observan callados y con gesto grave el proceso.

Repartida la primera tirada de naipes sobre el tapete, la expresión de Queco cambia radicalmente, presagiando malas noticias.

      —    ¿Qué has visto? ¿Algo malo? ¿Es en mi casa?
      —    Algo muy malo —Queco traga saliva con cierta dificultad—.